DEMONIOS


 

DEMONIOS – 18/12/2024

Desde mediados del mes pasado se están observando miles de objetos voladores no identificados, especialmente en los Estados Unidos, sin que nadie pueda explicar su procedencia. En algunas ocasiones son acompañados de tenebrosos sonidos como los llamados trompetas del apocalipsis.

El evento anual de Salt Connections en Nueva York, una conferencia destacada por tratar temas de gran relevancia mundial, concluyó en mayo con una mesa redonda en la que intervino el coronel retirado Karl Nell, que cuenta con una formación en ingeniería electromecánica, ha servido en la Defensa Militar Espacial, trabajado en la industria de Defensa con empresas como Lockheed Martin y estudiado los fenómenos aéreos no identificados para el Gobierno estadounidense. Todo esto da peso a sus declaraciones de que “la inteligencia no humana existe. Ha estado interactuando con la humanidad desde hace tiempo. Hay personas en el Gobierno que están al tanto de esto”. Esta afirmación, audaz y sin ambigüedades, dejó claro que no solo es una cuestión de creencia, sino de certeza basada en datos y testimonios de alto nivel. Advirtió de la complejidad y posibles consecuencias de tal interacción.  Respaldó sus declaraciones mencionando figuras prominentes como Paul Hellyer, exministro de Defensa de Canadá, y Haim Eshed, exjefe del programa espacial israelí, quienes han expresado opiniones similares. Además, se refirió a legisladores estadounidenses que han demandado más transparencia sobre el tema, señalando que no se está diciendo la verdad.

La idea de que los extraterrestres y sus ovnis son espíritus malignos, es decir, ángeles caídos, enviados al mundo para engañar a la gente con el propósito de que creamos en la existencia de otras formas de vida circula desde los años cincuenta.

En 1968, por ejemplo, tras la prohibición de la lectura de la Biblia en las escuelas públicas de Estados Unidos, los avistamientos de ovnis y de encuentros cercanos con extraterrestres se hicieron más frecuentes. Todo indica que los alienígenas son una forma de manifestación diabólica. Así lo indicaba la revista Review and Herald que publicó varios reportajes en esa década para disipar las dudas y temores que suscitaba la presencia de los ovnis. Su editor, Francis Nichol, planteaba abiertamente: ¿No podrían ser estos ovnis una manifestación del poder de Satanás?

Se cree que los demonios, a través de sus artilugios voladores, desean que la humanidad los acepte. En la mayoría de los informes de contactos se presentan como servidores y amigos de la humanidad. Ellos desean sustituir a Cristo y llevarnos a una “nueva era de paz”.

En 2022 el Pentágono admitió que sus soldados se habían encontrado con ovnis unas 400 veces desde 2004 y el ex presidente George Bush afirmó que los americanos no estaban preparados para saber la verdad.

Eric Davis, científico del Laboratorio de Investigación de la Fuerza Aérea y de la gubernamental Corporación Aeroespacial, confirmó que se opusieron a los ovnis por ser satánicos. Y Luis Elizondo, director del Programa del Pentágono de Amenazas Aeroespaciales, también declaró en una entrevista a The Post que un alto mando le pidió dejar de investigar los ovnis ya que son cosas demoníacas.

También el responsable de la investigación ovni del Gobierno británico, el mediático Nick Pope, declaró que las autoridades de Defensa británicas creen que se trata de demonios que buscan atención y que interactuar con la vida extraterrestre es una trampa peligrosa que atenta contra Dios.

larazon.es